Ayer me acordé de cómo me sentía hace ya unos años, cuando huía de las dietas de cajón, de lunes a domingo. Estaba cansada de empezar todos los lunes por la mañana y acabar por la tarde. Recuerdo con terror las salas de espera donde me metían para después fiscalizarme quitándome los zapatos y subiéndome a las básculas cargadas por el diablo. Me sentía juzgada cada vez que desplegaban el metro para ver cuantos centímetros de cadera había perdido, pero por aquel entonces sentía que la única forma de bajar de peso era pasar por ese castigo.
Algo pasó dentro de mi y pedía a gritos un cambio de mentalidad. Salir del círculo vicioso de ponerme a “plan”. De estar triste y comer, de celebrar y comer, de aburrirme y comer. ¡Qué pesadilla!
Buscaba sin descanso un lugar donde sentirme cómoda para hablar de mi problema con los kilos, e imaginé el sitio perfecto.
Un lugar cálido, sin juicio, sin batas blancas, ni básculas, (qué horror, pesarte delante de alguien, parece que lo haces por quien te pesa realmente y no por ti, ¿verdad?). Imaginaba sonrisas, en un lugar donde poder aprender el por qué de cada una de las cosas nuevas que incorporaba a diario en mi nueva vida y no simplemente seguir órdenes. Poder compartir el momento que estás viviendo y no sentirte despachada porque los quince minutos de tu consulta han terminado.
Y como no existía tuvimos que crearlo, y estoy tremendamente feliz y orgullosa.
KilosOut es eso que imaginaba, es aquel lugar cálido donde compartir, celebrar y desdramatizar esto de los kilos que a algunas tanto nos persigue.
KilosOut es aprendizaje de hábitos nutricionales,
KilosOut es una red de apoyo formada por personas que han pasado y están pasando por lo mismo que tú.
KilosOut es un cambio en tu relación con la comida.
KilosOut soy yo. Y quizás también eres tú y aún no lo sabes.
¿Quieres descubrirlo?
#yosoykilosout